sábado, 8 de julio de 2023

Ese extraño equilibrio llamado "bienestar"

"La felicidad no consiste en realizar nuestros ideales, sino en idealizar lo que realizamos"
Alfred Tennyson



Cuando se realiza correctamente un asana, los movimientos del cuerpo son suaves, hay ligereza en el cuerpo y libertad en la mente. Cuando un asana se siente pesada, es un error.
El desafio es intentar insuflar una sensación de ligereza en el cuerpo. Eso puede lograrse extendiéndote mentalmente hacia fuera desde el centro del cuerpo. No pienses únicamente en elevar los brazos, sino en extenderlos hacia fuera en sentido físico, y cuando los estés sosteniendo, vuelve a pensar en extender la inteligencia yendo más allá de tu propio cuerpo. No pienses en ti mismo como algo pequeño, comprimido y sufriente. Piensa en ti como grácil y expansivo, por muy improbable que pueda parecer en ese momento.

Cuando perdemos esa ligereza nuestros cuerpos se encogen y el cerebro se torna pesado y torpe, y uno no ve nada. Se cierran las puertas de la percepción.
Eleva de inmediato la conciencia del pecho y abre la mente. Las esquinas del pecho son pilares y deben ser bien firmes. Encogerse tiene el mismo efecto que un narcótico para el cuerpo.

La tarea de la columna vertebral es mantener la mente alerta. Para conseguirlo, la columna debe mantener el cerebro en posición. La columna nunca debe estar caída, sino elevarse hacia sí misma. De otro modo se ensombrece la luz divina de tu interior.

Cuando uno se extiende en un asana debe mantenerse esa ligereza. Por eso, en todos los asanas hay que ascender para descender y descender para ascender. Por ejemplo, si queremos tocar los dedos de los pies primero debemos estirarnos hacia arriba para abrir la bisagra del centro del cuerpo, y así poder descender. De igual modo descendemos para ascender.



                                                               Padangusthasana


Intentamos completar un círculo, como en el famoso dibujo de Leonardo Da Vinci acerca de las proporciones humanas, el "hombre de Vitruvio". No vamos a romper una cuerda tirando en dos direcciones. Lo que intentamos hallar es un equilibrio de polaridad, no el antagonismo de la dualidad.



Cuando en el cuerpo hay suavidad y en la mente ligereza, el asana es correcta. La pesadez y dureza indican que el asana es errónea. Siempre que exista rigidez es que el cerebro sobreactúa y quedas atrapado y encerrado ahí y no hay libertad. Pero al ejecutar desde el intelecto del corazón, con ligereza, firmeza y al mismo tiempo suavidad, significa que se trata de un estiramiento total, de una extensión y expansión total. 

El asana realizada desde el cerebro nos hace pesados mientras que la que se hace desde el corazón nos torna ligeros.

 ¿Cuándo tiene que ser un asana blanda o cuándo tiene que ser rígida?

En movimiento, los músculos deben ser como los pétalos de una flor, abiertos y suaves. Nunca hay que ser rígido en movimiento; la rigidez sólo se adopta una vez adquirida la postura. (Y aún dentro de esa aparente "rigidez" en la inmovilidad de la postura, minimizamos el esfuerzo)




Al igual que un campesino ara un campo y ablanda el terreno, un yogui ara sus nervios para que puedan germinar y mejorar la vida. Esta práctica del Yoga trata de quitar las malas hierbas del cuerpo para que el jardín pueda crecer. Si el terreno está demasiado duro la vida no puede germinar. Si el cuerpo está demasiado tenso y la mente demasiado rígida, la vida no puede proliferar.

A diferencia de la rigidez, la tensión no es buena ni mala. Tiene que hallarse presente en el momento adecuado y en la calidad correcta. La vida es sopesar y equilibrar la tensión. No hay ningún sitio en donde los yoguis hayan dicho que no debe haber tensión en ninguna parte. Es preciso hallar la cantidad adecuada de tensión en el cuerpo. Esa cantidad adecuada mantendrá toda tu energía en el cuerpo. Demasiada tensión es agresión. Las lesiones son producto de la agresión, de realizar movimientos agresivos, no de hacer Yoga. Pero demasiada poca tensión significa debilidad. En el cuerpo debe haber la cantidad de tensión justa. La tensión adecuada es tensión saludable. Hay que llevar vida a todas las partes del cuerpo.




Recuerda: nunca estés rígido mientras estés en movimiento. Extensión es tensión, pero es distinto de rigidez. La rigidez nos convierte en frágiles y quebradizos, y hace que perdamos el equilibrio. Hay que alcanzar el equilibrio a todos los niveles del cuerpo y del ser. 


Fuente: "Luz sobre la vida" Yogacharya B.K.S. Iyengar